La malnutrición en todas sus formas — la desnutrición, las carencias de micronutrientes y el sobrepeso y la obesidad — impone costos económicos y sociales inaceptablemente altos a los países de todos los niveles de ingresos. En el informe sobre El estado mundial de la agricultura y la alimentación 2013: sistemas alimentarios para una mejor nutrición sostiene que para mejorar la nutrición y reducir estos costos debe comenzarse por la alimentación y la agricultura.

Las políticas y la investigación agrícolas deben seguir respaldando el crecimiento de la productividad en relación con los alimentos básicos y al tiempo prestar mayor atención a alimentos ricos en nutrientes y a sistemas de producción más sostenibles.

Los gobiernos, las organizaciones internacionales, el sector privado y la sociedad civil pueden ayudar a los consumidores a elegir dietas más saludables, reducir el desperdicio y contribuir a un uso más sostenible de los recursos proporcionando información clara y precisa y garantizando el acceso a alimentos nutritivos y variados.

Informe FAO (en inglés)
Resumen (castellano)