La Comisión Europea ha publicado un informe sobre biodiversidad, que abarca el periodo 2001-2006, en el que se pone en evidencia que los hábitats costeros, de prados y humedales son los más amenazados debido, principalmente, a la disminución de los modelos de agricultura tradicionales, el desarrollo del turismo y el cambio climático. Igualmente, el estado de conservación de todos los tipos de hábitats relacionados con actividades agrícolas es mucho peor que el de otros tipos de hábitats, lo que se explica por el paso a una agricultura más intensiva, al abandono de la tierra y a la mala gestión del suelo. Por otro lado, en el informe se constata que existe un problema específico con el medio marino, en el que el estado de conservación del 57% de las especies marinas y alrededor del 40% de los hábitats marinos se clasificó en la categoría “desconocido”.

Informe